Existe multitud de mobiliario vial que induce a error, tomándolo como radar cuando no lo son. Algunos son cabinas como las que guardan radares, pero les delata la falta de orificios para que trabaje la óptica y el flash. Otros son estaciones meteorológicas, con su veleta y todo. Y otros son cámaras encima de farolas, que por la altura e inclinación es imposible que sean radares, o cabinas con cámaras para la simple vigilancia del tráfico en las vías.
A continuación, unas simples cámaras de vigilancia. Encima de postes altos o farolas nunca pueden multar:
Tampoco hay que confundir con radares las células fotoeléctricas que hay encima de algunas farolas y que se encargan de encender el alumbrado cuando se va el sol:
Estas cámaras tras un pórtico son simples contadores de vehículos o de vigilancia del tráfico:
Estas cabinas en la M50 de Madrid llevan fácilmente a engaño. Aunque tengan cámara en la esquina superior, tampoco son radares:
Recientemente se ha instalado en la ciudad de Barcelona este modelo de cámaras de control de tráfico, con iluminación infrarroja. Cuidado, porque es muy similar al modelo 1B de radar de pórtico, pero a diferencia de aquél, aquí hay dos cámaras en lugar de tres. Y no es radar:
Estos paneles, que suelen avisar de la velocidad a la que circulas, tampoco multan:
Tampoco son radares las estaciones meteorológicas que hay al lado de las vías:
El artefacto que viene a continuación tampoco es un radar. Algo tan aparatoso y visible no recaudaría lo suficiente. Son lectores de matrículas, y se suelen colocar en zonas sensibles, como peajes y aeropuertos, para fichar posiblemente a los verdaderos malandrines: